(44/52) Fin del comunicado
Hoy desperté triste y fui a comprar ropa.
Ahora me siento triste y angustiada.
Oh, no.
Desayuné mucho porque tenía mucha hambre.
Un jugo tropical que tenía plátano. A mí no me gusta el plátano.
Chilaquiles con huevo estrellado. El huevo era perfecto. Todo sabía delicioso y hasta abajo del plato había frijoles refritos. Con la salsa que sobró me comí un pan en trozos. Un pedazo de baguette.
Pedí un Uber a la condesa pero el café donde quedamos estaba muy lleno, así que fuimos al de enfrente. Hablamos de libros y familia y bailes típicos de su ciudad natal.
Caminé al metrobús y por primera vez leí de día a Joan Didion.
Me hice al fin de un sillón, luego de más de diez años de vivir sola. Ya voy a tener dónde leer.
Y aunque no debo tener expectativas, hoy fue un día que me dejó esperanzada en el futuro. Y como es diciembre, eso está bien.